Israel, la nación de las start-ups de alta tecnología, le sorprenderá en cada esquina, en cada piedra, en cada huerto. Cada año, Israel acoge a cientos de miles de personas que vienen a buscar sus orígenes en lugares míticos por donde circulan las 3 grandes religiones monoteístas. Se trata de miles de pistas para llevar a cabo un team building inolvidable con sus equipos.

Israel, la nación de las start-ups de alta tecnología, le sorprenderá en cada esquina, en cada piedra, en cada huerto: miles de pistas para protagonizar un team building inolvidable con sus equipos.

Tomar un café con cardamomo en un puesto de la Ciudad Vieja de Jerusalén, contemplar la puesta de sol sobre la Ciudad Santa desde la cima del Monte de los Olivos y la salida del sol sobre el Mar Muerto desde la fortaleza de Massada, atravesar Tel Aviv a pie y el desierto del Néguev en un jeep, dormir en un vivac del desierto o en una posada de la época de las Cruzadas: un viaje a Israel es tanto un viaje en el espacio como en el tiempo

Israel, cuna del cristianismo y del judaísmo, es también el tercer lugar sagrado de los musulmanes; acoge cada año a cientos de miles de personas que vienen a buscar sus orígenes. Cualquier viaje a Israel debe pasar por la ciudad vieja, donde están representadas las tres grandes religiones monoteístas.